- Hazme el amor.
Cuando estas palabras acariciaron los oídos de Soldado una sensación extraña recorrió su cuerpo y le impulsó a rodear a Bailarina con sus brazos y a besarla.
Un beso lento, de esos que roban el sentido y hacen perder la noción de todo.
Y le mordió el cuello como un muerto de hambre y se deleitó con su pecho y su tripa y bebió de su sexo y respiró sus orgasmos y disfrutó de cada vaivén de caderas como no lo había hecho con ninguna otra.
- Quiero quererte, de verdad que sí - susurró en su oído antes de correrse.
Uoo que bueno en serio me encantas :)
ResponderEliminar"Quiero quererte" , dijo... ¿Pero?
ResponderEliminarM.
A veces el miedo y el dolor nos impiden abrirnos... Eso es lo que sufre Soldado.
EliminarYa se verá cómo acaba todo :)